Charo Rodríguez

Charo Rodríguez Fotografías

Mar Baltico





El Mar Báltico, llamado así por el istmo báltico que se extiende desde Stettin hasta Reval en la ensenada finlandesa, es un mar intracontinental, de interior llano y aledaño al norte del océano Atlántico. En contraste con el Mar del Norte, el Mar Báltico no tiene pleamar ni bajamar y por eso se congela fácilmente. Además cuando los temporales arremeten, no lo hacen con tal intensidad como en el Mar del Norte. La costa alemana del Mar Báltico se extiende desde Flensburg hasta la bahía de Pomerania, y se caracteriza por tener llanas playas de arena, singulares acantilados, bahías y rías, que se clavan profundamente en el continente: rías de Flensburg, la bahía Schlei, bahía de Eckernförd, bahía de Kiel y de Lübeck.



La costa el Már Báltico de Mecklemburgo-Pomerania Occidental está caracterizada por playas de arena fina, la elegante arquitectura de balnearios a orillas del mar llenos de larga tradición e islas como la de Rügen, Usedom y Hiddensee. La región es ideal para quienes gustan de tomar el sol y bañarse, para surfistas y románticos, para capitanes y visitantes en busca de reposo y curación provenientes de todo el mundo.










Casi ninguna región en Alemania es tan variada como Rügen. El paisaje acantilado de Rügen se hizo famoso en el mundo entero a través de la romántica pintura de Caspar David Friedrich. La brillante piedra caliza no es solamente una hermosa vista, sino también posee poder curativo, que se usa en los tradicionales balnearios de la isla.
Usedom es la región más soleada de Alemania. Playas de arena blanca, interminables de hasta 70 metros de ancho, prometen descanso absoluto. Los balnearios imperiales de Ahlbeck, Heringsdorf y Bansin, son balnearios curativos con un gran pasado lleno de encanto y cordialidad.








En Pomerania Occidental existen todavía lugares intactos, bosques castizos y pantanos espectrales en los que entre otras cosas, águilas marinas y cigüeñas se sienten como en su casa. Verdes avenidas dirigen a través de la región nororiental alemana. En las ciudades hanseáticas Stralsund, Greifswald, Anklam y Demmin, se puede seguir excelentemente las huellas de la historia. Aquí impresionan las casas patricias decoradas lujosamente, catedrales, monasterios y ayuntamientos.